- El Nacimiento del río Pitarque

Track de la ruta.

Info de la ruta.

Una de las rutas más impresionantes, es sin duda el nacimiento del río Pitarque. Enclavado en el Maestrazgo turolense, territorio que estuvo bajo las órdenes militares del Temple.

Había estado en la Sierra de Javalambre ascendiendo sus montañas, había recorrido la Sierra de Albarracín, tiempo atrás y quería conocer esta comarca del bajo Aragón.

Debo decir que sus paisajes y su entorno natural, es de lo mejor de Teruel y nada tiene que envidiar a parajes y rutas más conocidas.

Y tiene de todo para perderse por sus tierras…Dormir ya en cualquiera de sus pueblos, como Cantavieja, Cañada de Benatanduz o Villarluengo en el Maestrazgo es una gran experiencia, yo por ejemplo dormí en una Torre Templaria rehabilitada en Villarluengo y estuvo genial.

Y adentrarse al Maestrazgo va a ser una delicia para los sentidos, recorrer los 60 km de la carretera A-1702 conocida como “The Silent Route”, por sus valles, agrestes barrancos, pueblos colgados en la roca, un paraje sobrenatural.

Dejo atrás Villarluengo, y prosigo por la The Silent Route, hasta el desvío a Pitarque.

Hay varios aparcamientos, a la entrada y por el pueblo, que suelen llenarse los fines de semana y festivos.

Y es que el lugar lo merece, una de las mejores rutas de la península, muy llevadera y de apenas 10 km.

De la comarca del Maestrazgo destacaría dos rutas, una la que os relataré en breves momentos, el nacimiento del río Pitarque y otra conocida como las Hoces del río Guadalope y su puente natural (Por falta de tiempo no pude realizarla), que os animo a recorrer.

Así como las Grutas del Cristal, en los Molinos, el Puente de Fonseca en Castellote, los Órganos de Montoro, etc…

Dejo el vehículo a la entrada del pueblo, para adentrarme y callejear por sus calles. La ruta está muy bien indicada por el mismo, y un ligero descenso por camino, me lleva a las afueras del pueblo, entre campos de cultivo.

Por Pitarque.

Por Pitarque.

Me gustan estas salidas, dejar a atrás mi vida de urbanita, en donde la naturaleza esta domesticada y donde parece que no ocupa un lugar en la vida cotidiana. Quizás olvidemos que nuestro origen está ahí, y el entorno donde se encuentran nuestras necesidades más sutiles, no solo por la hermosura de sus parajes, no solo por la aventura que conlleva, el misterio oculto que nos atrae, un gran regalo que necesita ser explorado, que nos va a oxigenar algo más que nuestros pulmones, nuestra alma. Quizás no salga rejuvenecido físicamente, eso no es importante, el tiempo pasa para todos igual, pero cuando estas recorriendo el medio natural, el tiempo parece detenerse por momentos.

Mi camino me lleva hasta la Ermita de la Peña, donde da comienzo la encajonada senda, que paralelo al río se va acercando las grandes paredes que lo escoltan. La vegetación cubre por momentos la senda, en forma de techo natural, y se deja a un lado una antigua central hidroeléctrica.

Pasarelas de madera, sortean las chorreras de agua que bajan  de la montaña, una hermosa cascada te recibe con los abrazos abiertos en este día soleado. Te refresca con el salpicar de sus aguas en las rocas…

Comienzo de la ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.Central hidroeléctrica.

La senda cómoda de andar, es un libro abierto para los ojos… De la vegetación destacan los Chopos, Sauces, Avellanos y Mostajos entre sus cortadas paredes, surca el Buitre Leonado, y la cabra Montés.

En el recorrido, hay alguna pequeña senda que desciende hacia el río, para ver alguno de los saltos, entre la tupida vegetación. Hay tramos donde la vegetación se hace más densa, de múltiples colores y donde la luz, te ilumina con infinidad de destellos.

Cruzado el puente, numerosos saltos de agua, asombran a sus visitantes, un lugar para el arte de la fotografía, es fácil ver alguna que otra persona con un trípode y grandes cámaras, para sacar esas instantáneas moldeadas por la naturaleza. El nacimiento del río Pitarque, es la mayor obra de arte natural, sale entre las paredes de las aguas subterráneas, que en forma de chimeneas se precipitan hacia su río. El primero de los afloramientos, se le conoce como la chimenea del Ojal de la Fuente. Con lluvias intensas esta insurgencia se convierte en una impresionante cascada.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Retorno de nuevo hacia el puente, para ascender por escalones de piedra y proseguir por pasarelas y sirgas metálicas, para contemplar el Ojal de los Planos y el más increíble de sus salidas, el Ojal de Malburgo, con un fuerte caudal saliendo al exterior de su cueva.

Este último tramo, por senda escavada en roca, y unas cadenas, es sencillo pero en épocas de lluvias, hay que tener precaución al ser una zona más resbaladiza.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

El retornar es lineal, desde luego una de esas rutas que hay que conocer y visitar muchas vidas. Hoy no sé si he crecido más por caminar entre los árboles, pero hay muchas maneras de crecer…No?

Ruta del nacimiento del río Pitarque.

 Animaros a descubrir este lugar y la comarca del Maestrazgo, será un grato recuerdo en vuestra vida.