jueves, 30 de octubre de 2025

- El Espigüete, por la arista Este y descenso por la cara Norte.

 


Track del recorrido.

Panel Informativo del entorno natural.

Hola amigos y amigas, me encuentro por la montaña palentina, para ascender al majestuoso y solitario, Pico Espiguete. Se alza como una catedral de roca blanca en el corazón de la Montaña Palentina, dentro del Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre. Su silueta piramidal, domina los valles de Cardaño, siendo una de las cumbres más emblemáticas de la Cordillera Cantábrica.

El Espigüete no sólo representa un desafío montañero: es también un símbolo geológico y natural, donde confluyen la historia de la Tierra, la vida silvestre y la experiencia humana frente a la grandeza del paisaje. Está formado casi en su totalidad por calizas paleozoicas — rocas sedimentarias originadas en antiguos fondos marinos hace más de 300 millones de años —. La acción del agua sobre la caliza ha esculpido un auténtico laberinto de formas kársticas: simas, grietas, dolinas y pequeñas cuevas. Durante el Cuaternario, los glaciares modelaron la montaña dejando valles en U y circos glaciares especialmente visibles en su vertiente norte. El contraste entre la verticalidad de sus paredes y la suavidad de los valles circundantes revela el poder de la erosión y del tiempo en el modelado de este coloso pétreo. El clima es típicamente de montaña atlántica: imprevisible, húmedo y fresco. Los vientos pueden ser intensos incluso en verano, y las nieblas frecuentes en la cumbre. En invierno y primavera es habitual la presencia de nieve y hielo, mientras que en verano las temperaturas más suaves permiten ascensiones cómodas, aunque se deben evitar las tormentas vespertinas.

La vegetación varía de forma notable con la altitud. En las zonas más elevadas, donde la roca domina y el suelo apenas existe, sólo sobreviven líquenes, musgos y plantas rupícolas que se aferran a las grietas. A medida que se desciende, el paisaje se tiñe de retamas, brezos y enebros rastreros, mientras los prados alpinos florecen en primavera con narcisos, peonías, orquídeas y campanillas.

Es refugio de una fauna variada y adaptada a la montaña. Entre los mamíferos más característicos destacan el rebeco cantábrico, el ciervo, el zorro, el tejón y, en zonas de alta montaña, el esquivo lobo ibérico. En los cielos planea el águila real, símbolo de poder y majestuosidad, acompañada por el halcón peregrino, el buitre leonado y el cernícalo vulgar. En praderas y roquedos también habitan especies más discretas como el acentor alpino y el escribano montesino, que llenan de vida los silencios del viento.

El Punto de partida: es el aparcamiento de Pino Llano (1.350 m), en la carretera entre Cardaño de Abajo y Cardaño de Arriba. Desde allí se toma una senda que asciende hacia el Collado del Cervunal, punto donde comienza la elegante arista Este. La subida por la arista ofrece trepadas de grado II, con pasos aéreos y panorámicas constantes del valle. El avance requiere atención y experiencia, pero recompensa con una visión privilegiada del macizo.

Comenzamos:

Desde la provincia leonesa, y bien prontito, vamos recorriendo la carretera de los pantanos, por la P-210 dejando atrás Velilla del río Carrión. Bordeando el embalse de Compuerto y seguidamente el embalse de Camporredondo, desde el cual ya tenemos las vistas al coloso del parque natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre, el Espigüete. Atrás dejamos el pueblo de Cardaño de Abajo para seguir por un desvío indicado por la carretera P-217 hacia Cardaño de Arriba. Enseguida se llega al aparcamiento de Pinollano, en la Tenada de las Lamas, donde da comienzo la ruta de ascenso por la arista Este del Espigüete y también la senda de la Cascada de Mazobre.

Vistas al Espigüete.

Entrada al aparcamiento de Pinollano.

Un cartel al inicio, nos enseña el recorrido por el PR-P6 de la Senda de la cascada de Mazobre, sobre la ruta, geología, vegetación y fauna del paraje natural. Una senda que recorremos pocos metros, para desviarnos por un estrecha senda, indicada con hitos, hacia el collado del Cervunal o Cerrunal, hacia la arista Este.

Este primer tramo, transcurre por matorral de monte, con un desnivel pronunciado, por donde usaremos las manos en algunas trepadas, por la roca caliza.

La ascensión, esta guiada por hitos, a lo largo de todo el recorrido, por tramos de roca, con trepadas y pequeños destrepes, en un ascenso continuado y de bastante pendiente.

Comenzamos, por la Senda de la Cascada de Mazobre, con Carlos y Dani.

Desvío a la senda, de la Arista Este.

Tramo de ascenso al Collado de Cervunal.

Una mirada atrás, hacia el aparcamiento.

Un tramo de desnivel fuerte, por donde iremos usando también las manos, en diferentes trepadas por la roca caliza.

Tirando para arriba, por la Arista Este, a Full.

Trepar y trepar...

Y no hemos echo, nada mas que comenzar.

Una mirada atrás.

La arista es muy entretenida y disfrutona, llena de estampas privilegiadas, de grandes panorámicas mires donde mires. Hay un momento que te sobrecoge, esta arista, cuando te asomas al filo de la misma y ves su prolongación, desafiante, en la inmensidad de este gran coloso de piedra. Se sigue por la misma, y se destrepa un tramo vertical de mas de 3 m, en el canalizo del flanco Norte. Hay varias maneras de descenderlo, con buen agarre y de poca dificultad, quizás pesa mas la impresión aérea que muestra hacia los lados. Sobra decir, que si se tiene vértigo, esta montaña tiene varios tramos, aéreos con sensación de vértigo, incluso cuando se desciende por la cara Norte.

Un hito de rocas, a modo de improvisada cima, en las cercanías de su espolón Norte, me indica su cima Este (2.447 m). El tramo final, por su cresta más aérea, nos acerca a la cima principal, para coronar un gigante entre gigantes, la cima Oeste del Espigüete (2.451 m).

Una panorámica hacia el Valle de Mazobre, su senda, al fondo las Agujas de Cardaño, Peña Prieta

La cima, comienza a asomar...

Otro regalo para la vista, el embalse de Camporredondo.

Ya se va acercando lo mas emocionante...

Guau, a por ello.

El resalte del canalizo del Flanco Norte, el cual hay que destrepar.

Otra manera, mas sencilla de hacerlo.

Y seguimos por su cresta.

Y ahí, tirando un poco de zoom, el otro rey, el Curavacas.

En la Cima Este del Espigüete 2.447 m de altura, y allí la gran cima.

Ultima parte de la arista...

Riki, en la cima del Espigüete 2.451 m de Altura.

Esa panorámica...

Recorriendo un tramo de la arista Oeste.

Vistas hacia el incendio, que llegaría a Portilla de la Reina.

Su arista nos ha brindado grandes panorámicas, como el embalse de Camporredondo, el coloso pétreo del Curavacas, otra gran montaña que ascendí hace bastante tiempo, y creo que no tardaré mucho en repetirlo. Cimas como el Pico Murcia, Peña Prieta, las Agujas de Cardaño, el embalse de Riaño, algunas de sus cimas, los valles aledaños, roto por el humo de un incendio, que causaría, con el paso de los días, un desastre medioambiental.

Comemos en la cima, disfrutando de sus vistas, con otros/as montañer@s.

Retrocedemos un poco, para desviarnos a la senda de la cara Norte. 

El descenso por la cara Norte es más exigente: una pedrera suelta y empinada obliga a mantener la concentración. En primavera o invierno puede acumular nieve o hielo, lo que aumenta la dificultad. Es aconsejable, mantener cierta distancia, y sobre todo evitar que alguna roca o piedra, caiga hacia abajo (avisad si esto ocurre), también es un tramo que se suele recomendar llevar un casco. Aunque, debo reconocer, que nunca lo lleve, las veces que realice esta ruta.

Comenzamos el descenso por la Cara Norte.

Descenso por la Cara Norte.


Carlos y Dani en el descenso por la Cara Norte.


Una mirada atrás y hacia arriba, de su corredor Norte.

Habrá momentos que usaremos las manos para ir destrepando algunos resaltes, y otros tramos de canchales rocosos, por donde progresaremos con cuidado.

Tramos entre el roquedo...

Y tramos por sus canchales rocosos.

Hacia atrás....

Ya se ve el valle cerca.

Finalizando el descenso, hacia la senda de la Cascada de Mazobre.

Finalmente, se alcanza el valle del arroyo Mazobre, un paraje fresco y verde que acompaña al montañero de regreso hacia el punto de partida. No sin antes, acercarnos a su cascada y refrescarnos un rato por sus aguas. Las del arroyo Mazobre, donde hay un mirador que se abre frente a la cascada. La cascada, está alimentada por los neveros del Espigüete, que se precipita entre paredes calizas, creando un microclima húmedo donde prosperan helechos, musgos, dedaleras y acónitos. Entre la fauna que frecuenta el valle destacan los corzos, rebecos y numerosas aves forestales, así como mariposas y pequeños anfibios que se refugian junto al agua. 

Ya en la senda, ascendemos un corto tramo, para llegar a la cascada.

Vistas a la Cascada de Mazobre.

Donde estuvimos un ratito bajo sus aguas y a su ribera.

Esto se acaba, descendiendo por la senda hacia el aparcamiento.

Quienes busquen una experiencia más suave pueden optar por la ruta de ascenso por la cara Sur, atravesando la pedrera sur, más cómoda, aunque físicamente exigente. En los alrededores destacan rutas como el Curavacas, el Peña Prieta, y paseos por los robledales de Cardaño o los miradores del embalse de Camporredondo. Los pueblos de Cardaño de Arriba y Cardaño de Abajo conservan la arquitectura tradicional de montaña y ofrecen una visión auténtica del medio rural palentino.

 

Conclusión:

El Pico Espigüete es mucho más que una montaña: es una obra maestra de la naturaleza. Su ascenso por la arista Este y descenso por la cara Norte reúnen técnica, esfuerzo y belleza, mientras que la senda de Mazobre nos recuerda el poder sereno del agua frente a la roca. Entre calizas, flores y viento, el visitante descubre no solo un reto físico, sino también una lección de humildad ante la fuerza y la armonía de la montaña.

Y que desde luego no puede faltar en tu mochila montañera....

 Otras rutas:

- Mi Primer ascenso por la variante de los Canalizos Noreste.

- El Pinar de Velilla de Carrión y Mirador del Espiguete.

- El Peña Prieta, Tres Provincias y Pico Infierno.

- El Curavacas.

Video de la actividad:

- El Espigüete por su arista Este y descenso por la Norte.

 


domingo, 19 de octubre de 2025

- Los Lagos de Saliencia y los Picos Albos.

 


Panel ilustrativo del medio natural.

Track de la ruta.

Información de Interés.

Torrestío.

Descripción de un hórreo.

Itinerarios BTT.

Me he dirigido esta vez, al Parque Natural de Somiedo en Asturias, para conocer sus fascinantes lagos glaciares. Había estado en un par de ocasiones, hace mucho tiempo, y me apetecía de nuevo recorrerlo, pero con el aliciente de ascender a sus cimas emblemáticas, como son los Picos Albos.

La ruta da comienzo en el Alto de la Farrapona, en la vertiente leonesa, donde hay un gran aparcamiento, origen de la ruta. Frontera entre León y Asturias, al cual se puede llegar desde el pueblo asturiano de Somiedo o por la vertiente leonesa desde Torrestío.

Recuerdo, antiguamente que llegar hasta este alto, lo hacías por una pista de arena rojiza, que cuando terminabas de ver los lagos y descendías para abajo, había que lavar el vehículo, para quitar el polvo rojizo que lo cubría. Ahora son carreteras asfaltadas hasta el alto y por donde también hay un pequeño chiringuito para tomarte algo.

La ruta a sus lagos principales (La Cueva, Cerveriz y La Calabazosa), se realiza de manera circular, con una distancia cercana a los 8 km, por pista primero y regreso por la senda que viene desde su ultimo lago, el de la Calabazosa.

Yo lo voy a completar, conociendo dos lagunas, como la de la Mina y la del Cebolléu, ascendiendo a los Picos Albos, excelentes miradores de los Lagos de Saliencia. La ruta normal de los lagos de Saliencia, no tiene perdida, es de fácil seguimiento y hay marcas del PR local blancas y amarillas del PR-AS 15.

Comienzas por una amplia pista forestal, en cuyos inicios hay una fuente para cargar de agua las botellas/cantimploras. Sobre todo, en verano, donde no podrás encontrar mas agua, excepto en un merendero, que han puesto pasando el Lago de la Cueva, en un alto.

Es un descenso suave, al que llegas primero al Mirador del Valle de Saliencia. Desde el cual podrás contemplar su exuberante y profunda naturaleza, del Parque Natural de Somiedo.

Este Mirador conocido como el Lazo, de tono rojizo, como el camino de los lagos glaciares, es un guiño a la antigua minería del hierro, de lo que fue la Mina Santa Rita. Un polvo rojizo que deslumbra en el paisaje, y las suelas de las botas/zapatillas de sus visitantes. La vista panorámica al valle de Salienza, es una historia del pasado geológico del entorno natural. Por donde se deslizaba el glaciar, cuyas cicatrices en las laderas del valle, están ocultas por la abundante naturaleza que hay por el valle.

Comienzo de la ruta, desde el aparcamiento del Alto de la Farrapona.

Descripción del PR - As 15.

Mirador del Lazo.

Vistas al Valle de Saliencia, Parque Natural de Somiedo.

Desde el mirador la pista, que se dirige a los Lagos de Saliencia.

En el mirador.

Una vez que se desciende por el camino, dejando atrás el mirador, se llega al primero de los Lagos de Saliencia, el Lago de la Cueva a la vera de la Peña La Cueva. En sus cercanías hay un pequeño refugio y un Teito (la techumbre que cubre una estructura, en la que se empleaban escobas, retamas, etc..). Este Teito se le conoce con el mismo nombre de su lago, el de la Cueva.

A orillas del Teito, sale una senda, que se dirige al Lago de la Calabazosa, descendiendo por su horcada. Normalmente, esa senda, suele usarse a la vuelta o regreso de la ruta de los Lagos de Saliencia.

El Lago de la Cueva, está situado, a mas de 1.600 m de altura, cuyas aguas, son ideales para algunas algas, como la Chara y algunos moluscos, crustáceos y el Piscardo. En las inmediaciones al lago, se encuentra la bocamina de la mina de hierro Santa Rita, donde hay un cartel interpretativo de su historia, a pies del camino.

Este es el camino, que asciende paralelo al lago, al Norte, y que suele ser la ruta normal del recorrido. Un camino rojizo, ascendente con buenas vistas al lago, para llegar a un mirador natural y tener una mejor panorámica del entorno.

La ruta en si, permite descubrir los conjuntos lacustres del Parque Natural de Somiedo, llegando por su camino a las cercanías de la laguna de la Mina o de la Almagrera. Una laguna estacional, que en la estación veraniega suele estar seca con humedad colindante, de las estaciones anteriores, donde puede coger agua. Sigo por su pista rojiza, hasta llegar a la Majada de Cerveiriz o Cerveriz, de amplios pastizales, donde puede concentrarse ganado vacuno por los alrededores.

Por la pista hacia el primero de los lagos.

Por la pista hacia el primero de los lagos.

Perfil del PR-AS 15.

El Lago de la Cueva.

Ruta de los lagos de Saliencia, hacia la mina Santa Rita y Lago Cerveriz.

Ruta de los lagos de Saliencia, hacia la mina Santa Rita y Lago Cerveriz.

Descripción de la minería del Hierro.

Laguna de la Mina o de la Almagrera.

Otro panel interpretativo del medio natural.

A la vista se tiene el segundo de sus lagos glaciares el Lago Cerveiriz o Cerveriz, el lago mas oscuro de la ruta. Su tono verde oscuro, es un habitad ideal para sus plantas acuáticas, destacando el Potamogeton, la Filigrana Mayor, las algas carófitas, por donde se da el ranúnculo en el litoral del lago. La fauna acuática, es característica a sus tres lagos, de crustáceos, moluscos, anfibios, ranas, la trucha común, el piscardo…

Hay una senda descendente, hacia el lago, que lo bordea, para seguir al Lago de la Calabazosa, que es la ruta circular a los tres lagos de Saliencia.

Sin embargo, sigo mi rumbo entre sus amplias vegas pastizales, por el camino que lleva al Lago del Valle.

Los carteles que hay por el camino, te llevan a conocer su historia geológica de gran importancia entre sus lagos glaciares, y sobre la riqueza de su avifauna.

Destacan sus grandes aves, como el águila real, el alimoche, el azor, el águila culebrera, las mas montañeras, como el treparriscos, la piquirroja, el acentor y gorrión alpino, las chovas, pinzones, carboneros …

Y como no, de grandes y pequeños mamíferos, desde corzos, rebecos, jabalíes, el zorro rojo, el lobo ibérico, la marta, la gineta, el gato montés, la musaraña, el desmán ibérico y una amplia población de osos pardos cantábricos, hacia el parque natural de Somiedo.

Un cartel de rojo cobrizo, me indica a pies del camino, la dirección al lago del valle, y al resto de los lagos, cartel que dejo atrás y sigo mi rumbo, un corto tramo, hacia el lago del valle.

Un par de refugios entre sus pastizales se observan desde el camino, un camino que abandono por una trocha o senda difusa hacia los refugios, para tomar un sendero estrecho, guiado con hitos hacia la laguna del Cebolléu.

Lago Cerveriz o Cerveiriz.

Dejando atrás el segundo lago, por la pista hacia el Lago del Valle.

Tramo del Lago del Valle y Laguna del Cebolléu.

Desvío a los refugios de la vega, vistas a los Picos Albos.

Por una senda guiada con hitos.

Una mirada atrás, descubres el Lago Cerveriz y el de la Calabazosa.

La Laguna del Cebolléu.

A partir de aquí es un continuo ascenso por trocha, con hitos que te llevan a la laguna y al circo glaciar de los picos Albos.

El primer tramo es un ascenso suave hacia la laguna, una laguna seca al igual que la de la Mina, por estas fechas veraniegas.

Dejando atrás la laguna, se empieza ascender por su senda escarpada entre un roquedo primero para salir a un ascenso de fuerte pendiente al collado de los Albos.

Aquí el calor de la estación se hace notar, hasta al llegar al collado donde sopla con fuerza el viento.  Un pequeño descanso, para acometer primero la subida al Albo Occidental, con una pequeña trepada entre sus rocas, sin dificultad y alcanzar su pequeña cima.

Una hermosa cima, de 2.067 m de altura y grandes panorámicas, destacando el Lago del Valle, el Albo Oriental, el Pico Rubio, el Lago de Cerveriz…

Rumbo al Collado de los Albos

Un tramo de fuerte pendiente.

Panorámica desde el collado de los Albos.

Hacia el Albo Occidental.

Ascenso al Albo Occidental.

Vistas desde la Cima del Pico Albo Occidental, al Lago del Valle.

Cima del Albo Occidental 2.067 m de Altura.

A continuación, se desciende de nuevo por el cordal, para ascender en la vertiente contraria, al Pico Albo Oriental, siendo el más alto, con sus 2.103 m de altura.

De grandes panorámicas, destacando el Lago de la Calabazosa, y las cumbres en el Parque natural de las Ubiñas, asomando Peña Ubiña.

La ruta puede alargarse, tomando una pequeña senda hacia el Pico el Valle y descender al Lago de la Calabazosa.

Se desciende y se prosigue por el cordal al Albo Oriental.

Ascenso al Pico Albo Oriental.

Cima del Pico Oriental 2.103 m de Altura.

Panorámica desde la cima del Pico Albo Oriental, al Lago de la Calabazosa, asomando al fondo el Macizo de Ubiña.

Un mirador al Lago de la Calabazosa.

Desciendo del Albo Oriental, para retornar a las cercanías de la laguna del Cebolléu, y seguir por senda con las marcas del PR blancas y amarillas, por un descenso brusco, entre rocas, al Lago Cerveriz.

Ya en el lago, enlazo con la ruta normal de los Lagos de Saliencia, por una senda descendente, que bordea el Lago Cerveriz, para ascender un corto tramo y contemplar su lago mas grande y profundo, el de la Calabazosa.

Una bonita senda que circunda sus aguas transparentes, hacia su represa, cuya senda asciende mas vertical a la Horcada de Calabazosa. Una senda sin perdida alguna, muy marcada que continúa a uno de los arroyos que nutren al Lago de la Cueva, ya a la vista, para descender al Teito y refugio y llegar al camino, que viene desde el Alto de la Farrapona, origen de la ruta.

Una vez descendido de la cima y del collado de los Albos, una senda evidente desciende al Lago Cerveriz.

Descenso pronunciado al Lago Cerveriz.

Lago Cerveriz.

Se sigue por senda, bordeando el lago.

Para llegar al Lago de la Calabazosa.

Lago de la Calabazosa.

Panorámica del Lago de la Calabazosa.

Ascenso a la Horcada de la Calabazosa.

Pasando la Horcada, la senda sigue hacia el Lago de la Cueva.

Llegando al refugio y al Teito.

Teito de la Cueva.

Retrocediendo hacia el aparcamiento y finalizando la ruta.


* Video de la Acividad:

- Los Lagos de Saliencia y los Picos Albos.

* Otros lugares cercanos de Interés:

- Ascenso a Peña Ubiña y Ubiña Pequeña.   

- La Senda del Oso.

Una ruta ideal, adentrarse a conocer sus lagos glaciares, sus picos de grandes vistas, su historia minera y geológica, que no puede faltar en tu mochila viajera natural.