- El Castañar del Tiemblo y el Alto del Mirlo.

 

Castañar del Tiemblo.

Panel Informativo I.

Panel Informativo II.

Track del recorrido.

La estación otoñal, es ideal para visitar y conocer nuestros bosques. Y voy a comenzar, a realizar una serie de rutas, para descubrir el ecosistema natural, que durante esta época deslumbra y atrae a infinidad de personas. Y que mejor lugar, para iniciar esta búsqueda, que adentrarme por tierras abulenses, para conocer unos de los bosques mas importantes de Ávila y de nuestra península, como es “El Castañar del Tiemblo”.

La ruta que realizaremos, no solo va abarcar el entorno del Castañar, sino que ascenderemos a lo alto de su serranía, para obtener diferentes panorámicas a través de miradores naturales y desde la cima del Alto del Mirlo o Casillas.

Y esta aventura da comienzo en el pueblo del Tiemblo, que da acceso, a lo largo de una pista asfaltada, al aparcamiento, del área recreativa de “El Regajo”. Nosotros llegamos prontito y no abonamos el parking, pero los fines de semana y festivos, viene a costar 6 euros por coche o 2 euros en el autobús habilitado, desde el punto de recepción al inicio de la pista, durante la estación otoñal. Sobra decir, que, durante el otoño, el entorno natural se masifica de visitantes y el aforo está restringido y controlado.

La ruta temática que de manera circular recorre el castañar, tiene un recorrido cercano a los 5 km, apto para tod@s y niñ@s. Un disfrute natural, que invita al paseo, a descubrir pequeños rincones naturales, arboles singulares, la flora y fauna del medio.

La primera parte del recorrido, sigue el sendero balizado PRC-AV-54, de marcas blancas y amarillas, en la cabecera de la Garganta de la Yedra.

La senda, asciende paralelo al arroyo del Castañar, de manera suave, entre la masa forestal de castaños, acompañados de especies de abedules, avellanos, cerezos silvestres, zarzales y rosales silvestres, en tramos donde el terreno forma una vaguada.

Estamos, casi a finales de octubre, y al castañar le falta un par de semanas para enseñarnos su color mágico dorado, solo una pequeña parte del sotobosque, mas cercano a la garganta, va cogiendo el color. Sin embargo, son los días ideales para observar su fruto, las castañas, que van inundando el paisaje que nos rodea. Las castañas, fue a lo largo de la historia un alimento necesario, rico en grasas y proteínas, que normalmente se cocían o asaban, y que también se molía para hacer la harina de la castaña, para elaborar el Pan de los pobres. Posee un microclima que lo hace especial, entre templado-húmedo, de fauna mediterránea, destacando especies como los jabalíes, corzos, zorros, ardillas, ginetas y un gran abanico de especies de aves rapaces, carroñeras, insectívoras, como el azor, el gavilán, águila real, milano real, búhos, arrendajos, cuervos, el picapinos, carboneros, zorzales, petirrojos, búhos, buitre leonado y el buitre negro. Unos buitres negros, que sobrevuelan el prado de la Manga, ya en las alturas, de la sierra.

Área recreativa, El Regajo.

Ascenso por la pista, al inicio de la senda de las Castañas.

Comenzamos....

Castañar del Tiemblo.

Hay, numerosos carteles, con variada información del entorno.

Mientras observamos este bosque cautivador, de troncos infinitos, llegamos a la fuente de los Cazueleros. Bifurcación de caminos, pues aquí la senda de las castañas se desvía para descender a la garganta de la Yedra y descubrir algunos de sus castaños centenarios. Nosotros seguiremos nuestra ascensión, encaminados hacia la Cruz del Tornero, donde el castañar se entremezcla con el robledal, también con ejemplares centenarios.

Dejamos atrás, la fuente de los cazueleros, para seguir ascendiendo entre sus castaños.

Unos castañares, que poco a poco darán paso, a un bosque mixto entre robles y castaños.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Entre robles centenarios.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

De grandes y majestuosos troncos.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

El bosque de robles, nos acompaña en este tramo de la senda, entre formaciones rocosas cubiertas de musgo y el tapiz arbustivo de los helechos. Un paisaje de contrastes, que pronto desaparecerá, según vamos cogiendo altura. La senda se vuelve cada vez más pina, nos encontramos en la cuesta de los Enebros, donde el recorrido nos hará sudar lo suyo. Una breve parada del camino, nos muestra el bosque mixto de castaños y robles, el valle de la Iruela, y la silueta del Alto del Mirlo. El camino bordea al Norte la montaña, introduciéndonos en las praderas del travies y llegar nuevamente a otra bifurcación de caminos. Al norte el camino se dirige al Cerro de la Encinilla, nosotros giramos para ascender una parte del camino del Puerto de Casillas. Este camino desde el puerto, asciende por una amplia pista a la cima del Alto del Mirlo o Casillas, sin embargo, nosotros comenzamos su ascensión, por una pequeña vereda guiada con hitos, entre el monte bajo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Tramo de ascenso al Alto del Mirlo.

Comienzo de la Cuesta de los Enebros.

Cuesta de los Enebros, una mirada hacia el robledal y castañar.

Cuesta de los Enebros, una mirada atras.

Bordeando el Alto del Mirlo.

Ascenso al Alto del Mirlo o Pico Casillas.

Ascenso al Alto del Mirlo o Pico Casillas.

Desde la cima, su amplia panorámica nos acerca de manera visual a sus impresionantes vistas mires donde mires, como el valle de Iruelas, el Valle del Tiétar, el Cerro Escusa, el Cabeza la Parra, etc. Es mi tercera vez en la cima, aunque la última fue hace ya más de 10 años.  Desde su cima, descendemos por la pista al puerto de Casillas y desde ahí nos encaminamos a ver el pozo de la nieve, un pozo cuya escalera se ha remodelado, por una metálica, antes era de madera.

Alto del Mirlo o Pico Casillas 1.768 m.

- Links del blog, de las ascensiones a las cimas del entorno:

- Alto del Mirlo o Pico Casillas y el Cabeza de la Parra.

- Cerro Escusa.

En recuerdo....

Descenso del alto de la cima, por la pista al Puerto de Casillas.

Rumbo al Pozo de la Nieve.

Pozo de la Nieve.

Estos pozos de nieve, eran las antiguas neveras, se lanzaban en forma de bolas al fondo, que con el peso se iban aplanando y se cubrían por capas, con la vegetación del entorno, como helechos, retamas. Y cuando se llenaba, se cubría con un tapiz vegetal, que lo aislaba. En verano, se descendían en caballerías, hacia los pueblos cercanos y se vendían también a tabernas, bares y posadas. 

Dejando atrás el pozo de la nieve, seguimos nuestro caminar, hacia el portacho del pozo. Ahora en ruinas, fue el refugio que utilizaban los cuidadores del pozo de la nieve. La senda, que nos desciende al castañar, esta balizada como un PR-AV-21, introduciéndose entre un magnifico robledal cubierto de helechos. Un descenso que también da paso al castañar, con algunos ejemplares centenarios y llegar al área recreativa de las Barrancas.

Dejando atrás el Pozo de la Nieve, enlazamos con el PR-AV-21.

Portacho del Pozo.

Descenso al área recreativa de las Barrancas, entre robles y pinares.

Descenso al área recreativa de las Barrancas.

Descenso al área recreativa de las Barrancas, castaños centenarios.

Descenso al área recreativa de las Barrancas.

Entorno del área recreativa de las Barrancas.

Un paisaje que invita al descanso y al relax, entre sus pinares resineros, otro bosque por el cual nos adentraremos, entre la vegetación de ribera del arroyo de San Jurdón. Un pequeño puente de madera, nos cruza el arroyo de la garganta de la Yedra, para introducirnos en el bosque del castañar, mas reluciente, ahora que le da el sol. Nos desviáremos un poco, para conocer su árbol más ilustre, “El Abuelo” un viejo castaño de mas de 500 años. Su enorme tronco debilitado, por el tiempo y el hombre, esta protegido por pequeños troncos, a modo de nietos, que lo rodean.

Puente sobre el arroyo de la Garganta de la Yedra.

Entrando al Castañar.

Tramo al Refugio de Majalavilla.

Tramo al Refugio de Majalavilla.

Su castaño más ilustre, "El Abuelo".

Su castaño más ilustre, "El Abuelo", de más de 500 años.

El camino nos deja en el refugio de Majalavilla, donde se une la senda oficial que viene de la fuente de los Cazueleros. Desde ahí, se desciende ya, a la cercana área recreativa del Regajo, origen y final de la ruta.

Sus pinares resineros.

Descenso al refugio de Majalavilla.

Refugio de Majalavilla.

Refugio de Majalavilla

Terminando la ruta en las cercanías del  área recreativa de el Regajo.

- Video de la Actividad:

- El Castañar del Tiemblo y el Alto del Mirlo.

Una ruta, que te permite contemplar uno de los mejores castañares de la península, que hay que conocer una vez en la vida y que desde luego no puede faltar en tu mochila viajera.